Alicia estaba emocionada por la visita de sus amigas, quería contarle las buenas nuevas. Hacía un par de días que no las veía y sentía que tenían mucho de qué hablar. Isabel, Camila y Lisbeth llegaron en el horario de visita de esa misma tarde. Apenas la vieron, corrieron a abrazarla.
– ¡Qué hermosa estás! –exclamó Lisbeth al verla. Hacía tiempo que no se veían, ya que ella no había podido ir visitarla.
– Y grande también –dijo Alicia acariciando su vientre. Todas rieron.
– ¿Ya sabes qué es? –preguntó Camila emocionada. Alicia asintió con una sonrisa.
– Es niño –les dijo y todas gritaron de emoción.
– Las enfermeras nos van a regañar –les recordó Isabel. Intentaron calmarse, pero estaban muy emocionadas.
– Será nuestro primer sobrino –exclamó Camila con emoción.
– ¿Cómo lo llamarás? –quiso saber Lisbeth mientras se acercaba para acariciarle el vientre.
– Jonas –respondió sonriente. Isabel la observó seria, pero no dijo nada.
– Es un bonito nombre –aseguró Lisbeth. Camila estuv