CAPÍTULO 27
— ¿¡Qué fue eso!? — preguntó Elena, preocupada, al escuchar un árbol caer.

Habían pasado varios minutos desde que Rax corrió detrás de Cristal.

— ¿Crees que le hará daño? — preguntó Lynn.

— No lo creo, es su compañera — respondió Tou. Todos esperaban pacientemente cerca de los vehículos a que Rax volviera con su luna fugitiva.

— Tenía los ojos rojos; eso no es bueno. Nunca lo había visto así — dijo Elena, con una profunda preocupación en su rostro. Minutos después, se escuchó un fuerte grito. — Iré por ella —.

— Es su luna; ellos deben resolver sus problemas — la detuvo Hiro, sujetando su brazo.

— ¡Pero Cristal apenas lo está asimilando! ¿Acaso no la viste? ¡Estaba aterrada! Rax debe comprenderlo —.

— Es decisión de ella creerles a las buenas o, en este caso, a las malas — mencionó Hiro.

— Él no piensa rechazarla. Debemos hacer que lo acepte. Ya se apareó con ella; su lobo no resistirá mucho tiempo alejado de su pareja — informó Tou.

— ¡Ha sido una semana agotadora! — espetó Roland, ll
Continue lendo este livro gratuitamente
Digitalize o código para baixar o App
Explore e leia boas novelas gratuitamente
Acesso gratuito a um vasto número de boas novelas no aplicativo BueNovela. Baixe os livros que você gosta e leia em qualquer lugar e a qualquer hora.
Leia livros gratuitamente no aplicativo
Digitalize o código para ler no App