Capítulo 72. Venganza
Agnes caminaba en círculos por la sala demostrando su enorme frustración.
Mikhail se había ido sin decirle dónde, y Karl parecía una estatua inmóvil incapaz de hablar, a pesar de que ella ya lo había amenazado con su propia daga en el cuello hasta dejarle una marca.
Su indignación crecía a medida que las horas pasaban y pronto, Kiana y los demás se dieron cuenta que no sería nada bueno.
Todo podía salirse de control muy rápido, poniendo en peligro a los gemelos.
Su amiga intentó tranquilizarla, aún sabiendo lo mucho que la joven odiaba estar lejos de su esposo.
Ella se sentía vacía e incompleta. No era algo racional, pero era un malestar casi palpable para los demás.
Se volvía físico.
-Agnes, tienes que calmarte. Esto no es bueno para tus bebés.
-No puedo, Kiana. Me dejó dormida, en la cama, creyendo que no notaría su ausencia y fue a encontrarse con Kiev. Precisamente con él. ¿Acaso se volvió loco? ¿Por qué verlo en persona? ¿Qué es lo que tienen que hablar? Y peor aún… ¿Por qué m