Esa fue una de las razones por la que Dimitar dejó la cofradía, a la par que se enamoró, perdidamente de Alessia. A él le parecía absurdo que Gergely intentase vengarse de un hecho que se remontaba hasta casi dos siglos atrás, cuando "Garras" Lucescu mató al bisabuelo de Gergely. -Somos otras generaciones-, les dijo Dimitar a los disidentes. -Jennifer Lucescu ni conoció a su bisabuelo-, les recordó.
Pero Gergely era obstinado, terco y vengativo, se pensaba venerado e idolatrado y que le correspondía reivindicar a la cofradía. Su propia obstinación llevó, entonces, al descalabro a la cofradía.
Los disidentes le informaron, entonces que Gergely estaba enceguecido por vengar a su dinastía. -Viajará él mismo a cazar a Jennifer Lucescu-, le dijeron a Dimitar, Él recordó que Jenny era amiga de Alessia, su esposa.
Gergely era un tipo malo, cruel, sádico y déspota, sumamente tiránico. Fue mercenario en Ucrania y Gaza, combatiendo siempre para el mejor postor y no solo dominaba bi