Inicio / Romance / Amar es un arte / No estoy dispuesta a hacer esto
No estoy dispuesta a hacer esto

-ASS-

Despierto en la mañana con una sensación extraña... Juraría que alguien estuvo en mi habitación anoche y me arropó. Naaaaa debió ser Dana, al final las dos nos quedamos dormidas como bebés después de haber conversado un buen rato sobre mi perfecto desconocido. 

Me estiro en la cama y ya son las 5:30, tomo mis cosas y me voy al baño, ¡Si! Mi propio baño personal, desde la gran lucha vivida hace unos cuantos años atrás, ahora cada habitación de esta casa tiene su propio baño. Igual extraño esas discusiones entre Ethan, Val y Thomas por quién se metía primero. 

Sonrío con el recuerdo y coloco mi música a todo lo que da, me meto al agua con mi sexy papucho de Robbie Williams. ¡Qué hombre! 

Al son de Millennium me quito la modorra y saco el cansancio de ayer, cierro los ojos y me relajo, hasta que... 

Dios, siento que alguien me observa... 

Miro hacia todos lados y no encuentro a nadie. Debo estar paranoica, sí, eso debe ser. 

Termino de ducharme, cierro el grifo y me coloco una toalla mullida y un turbante para el pelo, en eso veo al indeseable de Salem recostado en la alfombra del baño ¿cómo no lo noté? 

-Buenos días mi ternurita. 

-Miau... 

-Por lo menos tienes la decencia de saludarme pulgoso. 

Me vuelve a maullar y se levanta en cámara lenta, saliendo del baño y volviendo a subirse a mi cama para acomodarse y volver a dormir en mi almohada. Busco mis cremas y comienzo a aplicarlas para quedar perfecta, la alarma del celular de Dana suena y la pobre da un brinco que la deja casi pegada al techo, no entiendo como puede dormir si la música estaba a todo lo que da y con un simple ringtone se asusta.

-Buenos días cielito. 

-¿Tienen algo de bueno? - me dice rascándose la cabeza y bostezando.

-Estamos otro día vivas, eso debe ser algo bueno ¿no? -me encojo de hombros y sigo con mi rutina. 

-Me iré a duchar. 

-Okey, yo bajaré a ver que nos preparará Rosita para desayunar. 

-Con que haya café, me doy por pagada. 

-Café a la vena entonces. 

-Gracias. 

Me visto y hoy me coloco un vestido tipo A, que me llega hasta las rodillas, el papel que me tocará audicionar trata de una chica que busca su destino después de haber perdido al amor de su vida en el desembarco a Normandía, por ende, arreglo mi indumentaria a tono con la época. Me coloco mis pantuflas, porque ni loca me coloco tacones tan temprano y bajo y entro al comedor, donde ya están Papá, el abuelo y Mel leyendo sus respectivos cosas. Ver a Mel como si fuera la copia de papá con sus gafas de montura me saca una sonrisa y dios, debo decir que extrañaba esto. 

-Buen día familia. -saludo a todos y le doy un gran beso a cada uno. Los tres me responden los buenos días con su cara de seriedad que me produce más risa que otra cosa. 

-¿Qué harás hoy? -pregunta mi papá, mientras toma un sorbo de su café. 

-Tengo una audición a las diez en el Lincoln Center y luego aprovecharé de pasar a mi alma mater y saludar a Teresa. 

-Que bien y ¿De qué trata tu audición? 

-Es un piloto para una miniserie sobre la segunda guerra mundial, la historia que me toca audicionar es sobre una chica que pierde al amor de su vida en el día "D". 

-Wow, hermana que interesante, ¿sabías que ese día murieron cerca de 15.000 soldados entre aliados y alemanes? 

-Oh hermanita, no tenía la más mínima idea. Y tú ¿cómo sabes tanto de eso? 

-Wikipedia Dah. 

-Perdón su majestad de la tecnología. 

-Perdonada. 

-Jajaja se parecen tanto ustedes dos. 

-¿Tú crees abuelito? 

-Ay mi bella Alma, si no fuera por tu cambio en el color de cabello diría que son dos gotas de agua. 

-Uff, espero que no hables en serio, abuelito-Bufa Mel un tanto molesta. 

-¿No te gusta parecerte a mí? 

-Prefiero parecerme a Thomas, él es de lo más, es un verdadero tiburón de los tribunales y yo quiero ser abogada igual que él. 

Su comentario me viene de la patada, pero entiendo que nuestros padres no les deben de haber dicho nada respecto a nosotros y por eso, para mi pequeña hermanita, Thomas es su ejemplo a seguir al ser el que estaba más cerca de ellos. 

-Pues a mí no me importa parecerme a ti, hermanita. -llega Cameron y besa mi frente, luego hace un ademán a los demás saludando y le saca la lengua a Mel que lo está remedando. 

-Aww. Tan divino. Gracias mi principito. A propósito, nanita puedes preparar unos wafles, a Dana y a mí nos encantan. 

-Por supuesto, Almita. Será un honor poder servir a Jolie François. -suelta con una risita bella. 

-¿Las viste? 

-Completas, estoy esperando la última entrega, espero que se quede con Oliver. 

-Aww, Rosita. ¡Te amo! -Jolie era el personaje que había protagonizado en mi primera incursión en la pantalla grande, la primera entrega de "los días de nuestras vidas" tuvo tanto éxito, que el estudio hizo una saga de la historia y este sería la tercera y última entrega. -Solo puedo decirte que está buenísima la última entrega. 

-Ya ansío su estreno -dice Dana, entrando en el comedor con Salem en sus brazos-. Buen día para todos. Alma ¿dónde dejaste la comida de esta bestia peluda? 

-Déjamelo a mi señorita. 

-Dígame Dana, por favor, usted es Rosita y Alma me ha hablado muchísimo de usted. 

-¿Y de nosotros? -preguntan los mellizos al mismo tiempo. 

-Por supuesto, pero a ustedes si los había visto en el cumpleaños de su hermana, en cambio a Rosita no tenía el gusto de conocerla en persona y anoche no pude saludarla porque esta que ven aquí no me la presentó. 

-Eso es cierto, Dana. Y no te preocupes pues es un gusto ayudarte a darle de comer a esta bolita de pelos. 

-Gracias-Dana asiente y le entrega al peludo y luego se dirige a mí -. Me llamaron de la productora. El director y su asistente estarán justo a la hora, por lo que te pediría que no nos retrasemos tanto al comer. Me imagino que conoces el tráfico en esta ciudad. 

-Oh claro, claro. Deja que Rosita nos sirva el café y algo que comer y terminamos en menos de lo que canta un gallo. 

-Esa es mi jefa. 

Todos nos miran curiosos, pues nuestra interacción es demasiado fluida y eso me encanta. Con Dana he encontrado la forma de estar al día en todos mis trabajos. Es todo lo ordenada que no soy y eso me hace apreciarla incluso más de lo que le digo. 

-Pues, siéntate mi querida "sombra" jajajaja 

-Gracias jefecita. 

-¿Y mamá? 

-Eh... Ella salió temprano, estará en la tarde con nosotros. Hoy tiene uno de esos días extenuantes en la corte. -responde ¿dudoso? Papá, que extraño ¿no? Me habría encantado estar ahora en la mañana con ella, pero ni modo, tendré que verla después de la audición. 

Terminamos de desayunar y nos despedimos de todos con Dana. Tomamos mis bolsos y los manuscritos y salimos a encontrarnos con el guapo de Jex que volvió a sus trajes de guardaespaldas que debe haber tenido guardados en el closet. Con Dana lo miramos y soltamos un silbido. 

-¡Que guapo! -le digo, mientras me da la mano para subir a la Hummer. Jex me guiña un ojo y esboza una sonrisa ladina. 

-Creo que me gusta la ciudad. 

-¡Dana! -le replica con los cachetes rojos Jex y ambas nos reímos. 

-Entonces, te ves feo. 

-Jajaja ya paren, me voy a hacer pis. 

-Mejor vámonos, abrochen sus cinturones que nuestro próximo destino es el Lincoln Center. 

Llegamos con tiempo a nuestro lugar de reunión y nos recibe amablemente el asistente del director. Nos llevan al anfiteatro 12 y me quedo pasmada. Sólo hay varones y ninguna mujer para la audición ¿será que vendrán después? Con la cara dudosa, me aliso la arruga que no tiene mi vestido y saludo a todo el mundo, la mayoría de los actores que están son conocidos del medio, por lo que no me siento para nada incómoda por eso, salvo por no ver a otra chica audicionar para el papel. 

-Es un gusto poder conocerte -me saluda el director tomando mi mano y besando mis nudillos. 

-El gusto es mío, director Anderson. - Nos sentamos en los primeros asientos del anfiteatro y el director nos comenta a todos el interés por que participemos de esta miniserie. Además, nos cuenta que en unos minutos llegará el guionista y la directora de ambiente para tener las indicaciones necesarias. Además de la inversionista, cosa que me pareció extraña, pero dejé mis aprensiones a un lado, porque ¿Qué inversionista se aparece en una prueba de cámara? En fin, con todo dicho, me pide que utilice el camerino y me prepare. 

Entro al camerino que me han designado y hay varios vestidos hermosos, cada uno con un número de escena que debo audicionar, me pruebo el primero y me queda como guante. 

-¿Qué extraño? 

-¿Qué cosa mi ASS? 

-El vestido me queda perfecto, es como si lo hubiesen hecho para mí. 

-Creo que ya sientes que el papel es tuyo, cariño. 

-Jajaja no, no soy tan diva mi querida Dana, pero ¿notaste que soy la única mujer? 

-Puede ser que las demás tengan otro horario, como son varias escenas. 

-Mmm tienes razón. -Sacándome las dudas que tengo, me termino de maquillar y me llaman al escenario. 

Cuando salgo, me encuentro con que han llegado más personas y hay una chica que no reconozco entre los nuevos, pero sí veo a alguien que no pensaba o no quería ver todavía. La chica lo tiene tomado del brazo y habla con el director, mientras él trata de no parecer tan ¿Incómodo? Cuando el director señala donde estoy es que deseo que haya un cataclismo y todo desaparezca. 

- ¡Oh por dios, mira Thomas! Tu hermana es la que va a audicionar. -En ese momento, aquél que no veía hace prácticamente cuatro años se gira a verme y coloca una cara de terror. Trágame tierra por favor y escúpeme en Korea como tanto te lo he pedido... 

Tomo aire y veo a Dana contrariada. 

- Dana... 

- ¿ASS? 

- No estoy dispuesta a hacer esto... 

Con esas palabras dichas, me doy la vuelta y salgo como una flecha del lugar, importándome una m****a lo que digan todos en este momento.

Sigue leyendo este libro gratis
Escanea el código para descargar la APP
capítulo anteriorcapítulo siguiente
Explora y lee buenas novelas sin costo
Miles de novelas gratis en BueNovela. ¡Descarga y lee en cualquier momento!
Lee libros gratis en la app
Escanea el código para leer en la APP