Inicio / Romance / Amar es un arte / El equipaje más pesado es mi propio pasado
El equipaje más pesado es mi propio pasado

"So come on, get it on

I don’t know what you’re waiting for

Your time is coming, don’t be late, hey, hey

So come on”

Mientras suena Shine de Take That en los parlantes de mi casa, preparo mi súper desayuno esta mañana, amanecí con el canto de los pajaritos, el día de hoy y necesitaba un clásico para que me subiera el ánimo... Naaaa no dormí ni m****a y sorry, pero me encantan los clásicos anglos.

—So come on, get it on…— doy vuelta mi tostada francesa y sigo graznando a todo pulmón, mientras suena la cafetera avisándome que mi dosis diaria de café ya está lista. En eso escucho unos golpes fuertes en la entrada de mi departamento.

—¡YA VOY! Señor, por san Ginés, que no me dejen tener mi concierto personal tranquila, ¡ash! — gruño molesta acercándome a la puerta, la cual abro sin mirar, obviamente ya sé quién está detrás. — Adelante su majestad.

—¿Cuándo aprenderás que vives en un edificio y tienes vecinos a los que molestas con esta bulla a estas horas? — y sí, es mi adorada asistente Dana Rogers, que va como alma que lleva el viento derechito a mi computadora para apagar mi playlist de Spotify.

— ¡Dana!

— ¡Alma!

—¡Dios, eres una verdadera espinilla en el culo mujer! — reclamo molesta al incordio de asistente que tengo.

—Señorita por favor, ¿qué vocabulario es ese para una súper estrella como usted? Con esa boquita come.

—Ah, ya cállate mujer y ven a desayunar, ¿confirmaste lo del MET?

—Bueno… Yo… — definitivamente, no lo ha confirmado y está tratando de buscar la justificación a lo injustificable. Brrrrr me salió un Dolores Umbridge y me dio un escalofrío.

—¡Dana María del perpetuo socorro no me hagas enfurecer tan temprano niña!

—Alma, es demasiado temprano, al mediodía haré la confirmación.

—Mmm ya ¿y?

—Eso…

Me meso los cabellos de un lado a otro, mientras Dana se encoge de hombros, siento que después de estas dos mentadas invitaciones que recibí ayer hay Salem encerrado. A propósito ¿dónde miércale está metido ese bicho raro?

—Dana, te lo voy a aceptar, pero por mi mamita que está… en Nueva York que si no confirmas lo haré yo misma.

—A propósito de mamita, ¿cómo te enteraste de la gala del MET si yo no te entregué esa invitación?

—A ver, Dana María…— me calla, moviendo sus manos en son de rendición, pero decido continuar — las invitaciones estaban en el lote de cartas de los admiradores que dejaste ayer en mi camerino, así que no te hagas la tonta, tú misma las dejaste ahí, pues sin verificación tuya nada pasa por mi mano.

—¿Invitaciones?

—Eso dije, cariño. Invitaciones.

—Alma, de verdad que me estás asustando, jamás te dejo una invitación que no haya sido aprobada por la jefa… y sobre todo las que vengan de Nueva York…— lo dice susurrando y mordiéndose las uñas, pero es mala actriz y de verdad que ya me estoy empezando a impacientar.

—Dana… ¿de verdad crees que nací ayer para no darme cuenta que me han estado ocultando algo por cuatro años?

—Alma, no… lo que pasa es que…

—¡Dios Dana! Te considero mi mejor amiga, mi hermana, la que ha estado conmigo estos cuatro malditos años de sufrimiento y soledad, pero no fuiste capaz de devolverme siquiera un poquito de esa confianza.

Quiero llorar, patalear y hacer uno de esos berrinches que hacía cuando era pequeña y no se hacían las cosas a mi manera, pero en este caso era demasiada la pena que siento, había algo que todo el mundo me estaba escondiendo y, al parecer, alguien estaba tratando de desenmarañar o por lo menos de dejarme ver la luz.

Dana llora como si la estuviera matando, en cambio yo sigo estoica, con mis manos empuñadas, siento como mis uñas ya están provocando daño en mis palmas, comienzo a hacer mis ejercicios de respiración, antes de acriminarme y me mentalizo. Inhala, exhala ASS…

—Hay otra cosa que no sabes Alma…

—¿Qué cosa puede ser peor que te llegue la invitación al compromiso de tu ex amor?

—¿Qué?—ahora Dana sí que se me va a desmayar, está pálida y creo que la boca se le desencajó.

—Pues eso cariño, además de la invitación a la gala del MET me llegó la invitación al compromiso de Thomas.

— ¡Oh, Alma! ¿estás bien?

—No tengo idea—respondo encogiéndome de hombros y la verdad es esa, ¿tengo pena? Obvio que sí ¿pero por qué? Ya han pasado cuatro años y se supone que lo debemos superar, él ya me superó, son obvias las razones, pero igual mi corazoncito duele. —En fin Dana María. ¿qué puede ser peor?

—Ah, verdad, a lo que venía—me entrega el iPad y comienzo a leer los titulares de las noticias de farándula y espectáculo.

“Noticias TMZ.

El nacimiento de un romance tras las cámaras.

Estos últimos días hemos visto a la bella ASS. Junto a su coprotagonista Newtt muy acaramelado en las playas de Palm Beach, se dice que ambos actores se estarían dando una oportunidad de pasar de la pantalla grande a la vida real.

Desde sus agencias no hay comentarios desmintiendo está información y tampoco confirmando.

Esperamos pronto tener noticias de esta nueva pareja del espectáculo.”

—Me lleva el…

—¡Alma!

—Ese debe haber sido Newtt, porque si fuimos a la playa, pero ¡a tomar sol! Dios, Este imberbe me va a escuchar. Creo que eso es lo único que extraño del teatro.

—¿Qué cosa?

—El que no había chisme.

—Alma, tú estás inmersa en este mundo y sabes cómo es.

—Eso es cierto, Newtt tendrá que darme una muy buena explicación. ¿Algo más para echar a perder un poquito más mi día?

—Noup, solo algunos guiones que te mandó la jefa para que selecciones tus audiciones.

—Okey, terminemos esto y luego vemos esos guiones.

—Fiuf. —resopla, mientras toma una de mis preciadas tostadas francesas.

—Nada de fiuf, tú tienes q confirmar una gala y yo llamar a mi madre.

—Pe…per…pero Alma… ¿irás?

—Por supuesto, es momento que deje de escapar del pasado y que mi familia deje de protegerme, ya no soy la niña tonta que se fue llorando cuando su novio le dijo que la odiaba y la culpaba por todo lo que estaba pasando, esa Alma murió ese día y está bien enterrada. Ahora, soy una mujer nueva, una de las mejores actrices del medio y no tengo porqué seguir sin ver a mi familia porque ese idiota siga en Nueva York.

Dana, tú sabes todo lo que extraño a mi familia, me he perdido tanto de mi ahijada y de mis hermanos pequeños por seguir huyendo de él y al final y al cabo creo que ya es tiempo de dejar de escapar y con su compromiso me lo reafirma.

—Te entiendo, Alma. Y prometo apoyarte en todo, además de ser “tu sombra”, soy tu amiga.

—Y nada más de andar escondiéndome cosas—la regaño como niña chiquita.

—Está bien.

—Entonces, escribe…

—¿y mi delicioso desayuno?

—Ese será tu castigo—me mira molesta, pero luego esboza una bella sonrisa.

—Está bien, está bien chiquita. ¿Que quieres escribir primero? —Muevo mis cejas en forma coqueta y me preparo para redactar…

“Estimado señor Di Rossi.

Agradezco su invitación a la gala del MET y, desde ya, ofrezco mil disculpas por no haber aceptado las invitaciones anteriores, por desgracia no pude asistir por otros compromisos, pero esta no será la ocasión. Ahí estaré presente y por supuesto que reservaré un baile para usted.

Tenga un buen día.

Alma Scott Soré. ASS.”

Veo que Dana termina el correo y doy enviar…

— ¡Alma!, ni siquiera lo terminé de leer— Dana es un incordio, pero la amo.

—lo hecho, hecho está querida, ahora se viene lo peor.

—¿Qué cosa?

—Llamar a mi madre…

Ay mamita querida, tenemos mucho que hablar y tú, muchas explicaciones que dar.

Sigue leyendo este libro gratis
Escanea el código para descargar la APP
Explora y lee buenas novelas sin costo
Miles de novelas gratis en BueNovela. ¡Descarga y lee en cualquier momento!
Lee libros gratis en la app
Escanea el código para leer en la APP