Velkan camina hacia ellos aun con la herida abierta en su pecho, estaba desangrándose, pero eso no le iba a impedir avanzar y cumplir con su objetivo.

—¿Dónde está Evelyn? ¿Por qué todos están aquí y ella no está siendo protegida? —les pregunta a ambos.

—Señor, ella está en la habitación resguardada, tal y cual como lo ordeno—musita Carl mirando la enorme herida en su pecho.

Él observa a Carl y luego a Vasile, segundos después y sin que ninguno de los tuviera tiempo de nada arremete con sus filosas uñas el cuerpo de uno de ellos hasta arrancarle la vida rápidamente. Los demás guardias dan un paso hacia atrás al ver aquella masacre sin explicación.

Nunca habían visto a su amo atacar a uno de ellos y menos a uno de los que consideraba su mano derecha. Eran los que su total confianza.

—Un traidor no puede estar bajo mi techo y menos respirar delante de mí.

—¡Amo!, ¿Qué ha hecho? —es Carl quien levanta la mirada para ver a su señor.

—Ayuda a estos humanos, recoge a los muertos y quémenlo