Mundo de ficçãoIniciar sessãoLos ojos de Jacob brillaron aún más ante la petición de Monique, mostrando su entusiasmo por la iniciativa. Ella percibió la emoción que irradiaba su mirada cuando la miró hacia arriba.
—Claro —respondió con voz ronca.
Se agachó y se quitó las bragas antes de tirarlas a un lado, pero su marido detuvo el gesto. Recogió la ropa interior y la acercó a la nariz.
—Huele sexy, huele bien —comentó, avivando aún más su excitación.
Se inclinó un poco para coger su pene duro, que permanecía firme incluso después de su anterior orgasmo. Parecía listo para otra vuelta.







