234. El regreso al hogar de la infancia
Cinco días después del juicio principal de Sarah y Nathaniel, toda la manada McTavish se encontraba reunida en las Tierras Bajas, dirigiéndose hacia el Monasterio Niebla tal como habían prometido. Malcolm y Josephine caminaban al frente, flanqueando a Logan y River que eran un par de tiernos niños de nueve años, quienes observaban con curiosidad el edificio de piedra que se alzaba ante ellos. Detrás venían Zacary y Lyra acompañados por sus respectivas parejas, Cassy y Joshua. Gael y Nelly cerraban la marcha con sus propias hijas, Sabina de seis años y Darla de cinco, mientras que Eloy caminaba junto al Druida Alder, intercambiando comentarios sobre la arquitectura del monasterio.
Era extraño para todos estar ahí sin necesidad de esconderse, sin ser unos fugitivos, sin documentos falsos, sin la tensión constante de ser descubiertos. Seis años atrás, cuando habían pasado cerca de este lugar durante su escape, en aquel tiempo cuando iban al Distrito Verde, habían tenido que mantenerse al