UNA SEMANA DESPUÉS - CAMINOS RURALES DE LAS TIERRAS BAJAS

El sol de la tarde se podía ver a través de las copas de los árboles que estaban a cada lado del tranquilo sendero que transitaba la manada McTavish a un ritmo constante, pero relajado. Una semana completa había transcurrido desde el violento encuentro con los forajidos, y durante ese tiempo, todos los “fugitivos” habían encontrado un ritmo de viaje que equilibraba eficiencia con comodidad, especialmente considerando que Logan y River apenas estaban descubriendo el mundo exterior día tras día, y eran pequeñitos prácticamente humanos con magia, también Josephine y el Druida Alder, por eso, no podían viajar a un ritmo mas forzado principalmente por ellos.

Los caballos de su botín, que eran nerviosos y fueron maltratados bajo sus antiguos dueños, ahora respondían con docilidad a sus nuevos jinetes. River había demostrado ser especialmente útil en este aspecto, usando su conexión druídica para calmar a los animales cuando se ponían