Leandro
Pensar y pensar es lo único que puedo hacer en estas cuatro paredes. Mi mente salta del estado en que está Líah a lo que me contó el abuelo. ¿Cómo pudo entregarles niños a esos hombres, aunque sea por su libertad? Y esa noche, ¿qué pasó realmente?
¿Cecilia mató a mi madre? Porque por primera vez lo estoy dudando. Si fue capaz de entregarle niños a esos hombres, y odiaba a los Messer porque la creían responsable de todas sus desgracias, ¿por qué no pensar que esa noche fue por las niñas y Cecilia se interpuso?
—¡Qué estrés! Ahora, dependo de Kira para ver a mi mujer.
No puedes morirte, amor mío, tienes que volver conmigo.
—Nadie me viene a decir nada. Todo lo tengo que hacer yo.
Me levanté y llegué hasta el consultorio del doctor que atendía a mi rosa después de pasear por toda el área preguntando por él.
—Buenas tardes, soy Leandro Koller, el esposo de Liah Koller Messer, y necesito saber de su estado.
—Me habían dicho sus padres...
—Es mi esposa, es mi derecho a saber de ella,