Mundo ficciónIniciar sesiónÁlvaro acarició ligeramente la mano de Sarah, le sonrió y se levantó camino al estrado.
—Su nombre, por favor —pidió el abogado.
—Nicolás Herrera.
—¿Qué relación tiene usted con la acusada o la familia Vicuña?
—Soy amigo de ellos.
—¿De todos?
—Así es.
—¿Conocía también al padre, a Miguel Vicuña? —Álvaro estaba tranquilo y confiado.
— Sí, por supuesto.
—¿Cómo era su relación con él?
—Buena, aunque al principio tuvimos algunos problemas, se solucionó todo.
—¿Hace cuánto conocía al Señor Vicuña?
—5 años.
—¿Y a la señorita Sarah Larraín?
—6 años.
—¿A







