Capítulo 109¿Por qué hay que esperar ese juicio?
—Soy yo Amelia, abre por favor—su voz se escuchó como un ruego
Amelia no pudo esperar más, y se decidió por fin, y abrió la puerta y con una seña lo invito a pasar, lo había extrañado muchísimo, tuvo el impulso de abrazarlo, pero se contuvo, sabía que eso no era prudente, no podría soportarlo e irían más allá de un simple abrazo.
— ¿Cómo estás, Amelia? —la miro fijamente se podía ver la ternura en su mirada
—Estoy bastante bien, solo extraño el movimiento de personas en la casa de Arabella y a los bebes.
—Amelia…podrías volver a trabajar conmigo…me haces falta—esto dejo pensativa a Amelia, cuanto le hubiera gustado decir que sí, volver a verlo todos los días y gran parte del día, pero era peligroso para sus emociones
—No es posible, ya me comprometí con Ricardo Wash y mañana vuelvo mi empleo
—A mí me haces falta, te prometo que no voy a perturbarte solo quiero tenerte a mi lado como antes, que me apoyes
—Lo lamento, pero no pu