Capítulo 108 Proposición de matrimonio
—Arabella, Señor Wash, uno de los bebes no deja de llorar
De inmediato ambos se levantaron apresurados y acudieron a la habitación de los niños, allí uno de ellos lloraba a gritos en los brazos de la enfermera y se mantenían en el pasillo, mientras el otro bebe dormía en su cuna en el dormitorio.
— ¿Qué le sucede? —Ricardo se lo quito de los brazos y comenzó a pasearlo caminando por el largo pasillo, su peor pesadilla era que uno de los bebes se enfermera
—No sé bien—les dijo ella—puede ser cólico, ya le cambie los pañales y no es por hambre, he intentado darle el biberón y no lo quiere, desde hace un poco de tiempo lo noto extraño
— ¿Y por qué no nos había dicho nada? —la férrea mirada intensa de Ricardo Wash dejo muda a la enfermera —Renato llama al pediatra dile que venga de inmediato, lo siento caliente
Arabella tocó al bebe—Sí, parece estar algo caliente, pero hace un rato estuvimos aquí y no lo observe así
—Puede ser que le esté comenzando—