- Creí que necesitarías un poco de apoyo…
- Darla… -dijo Thiago como si se tratase de una súplica.
- Thiago, Thiago Cedeño, sabía que no podía dejarte solo en este momento tan vulnerable de tu vida. -dijo Darla acercándose a él.
- ¿Qué… ¿Qué haces aquí? -dijo Thiago recordando lo sucedido hace meses atrás.
- Thiago, ¡Dios! Vi la noticia y supe que necesitarías un poco de apoyo, recuerda que nadie te conoce mejor que yo y sé perfectamente bien que nunca tuviste nada en contra de tu hermana…
- Ya no tiene caso hablar del pasado… -dijo Thiago cortando la conversación.
- Thiago… No seas demasiado duro contigo mismo, los dos sabemos bien que lo que sucedió años atrás fue porque Frida nos lo pidió, éramos idiotas, nos dejábamos convencer rápidamente… -dijo Darla tratando de parecer consciente.
- Dejemos ese tema por la paz, ¿A qué has venido? Sabes bien que no es bueno que estés aquí, ¿Cierto?
- Thiago, tú y yo sabemos muy bien que te casaste con Dayana por ese hijo que presumes, pero la ve