Mundo ficciónIniciar sesiónEn el dilema entre el destino y la casualidad, Romina, una mujer tímida y reservada, se encuentra en una encrucijada tras una noche de desenfreno en una fiesta. Allí, cautivada por unos ojos oscuros y enigmáticos, se sumerge en una conexión instantánea con un desconocido. Despertar sola y desorientada en una habitación de hotel al día siguiente deja a Romina devastada. Sin rastro del misterioso hombre, solo le queda el recuerdo fugaz de una noche de pasión y el anhelo de respuestas que nunca llegan. Tres años después, cuando su vida parece seguir un curso normal, una irresistible oferta de trabajo sacude su rutina, llevándola cara a cara con su pasado. La revelación de que el hombre detrás de la oferta es aquel desconocido de ojos oscuros la sumerge en un torbellino de emociones contradictorias. ¿Acaso él la recuerda? ¿O es ella quien no puede olvidarlo? Con sus destinos entrelazados una vez más, Romina se enfrenta a la pregunta que ha atormentado su corazón desde aquella noche: ¿Es su encuentro casualidad o está escrito en las estrellas? En medio de la incertidumbre, Romina y su misterioso enamorado se enfrentarán al dilema eterno del destino y la casualidad, preguntándose si su amor es una elección consciente o un designio del universo.
Leer más101 Epilogo IIIEl día de la boda había llegado, y la atmósfera estaba cargada de emoción. El lugar, decorado con delicadeza y elegancia, estaba lleno de flores blancas y lilas, las favoritas de Romina, que perfumaban suavemente el aire. El sol brillaba alto, y todo parecía perfecto, como si el mundo mismo quisiera celebrar junto a ellos.Romina estaba frente al espejo, sus manos temblorosas mientras Carlota y Mónica le ayudaban a ajustarse el velo. La habitación estaba llena de risas y murmullos nerviosos. Mónica, a pesar de estar embarazada de cuatro meses, apenas mostraba una pequeña barriguita que disimulaba bajo un vestido elegante, pero su radiante sonrisa era imposible de ocultar.—¿Estás lista para esto? —preguntó Mónica, con una dulzura que Romina siempre había apreciado—. Porque después de hoy, no hay vuelta atrás, querida.Romina soltó una carcajada suave, era lo que más quería, ya llevaban dos años viviendo juntos, esto solo era una mera formalidad que tanto Jacob como ella
100 Epilogo IIOmnipresente1 año despuésEl aire en la sala del trono estaba impregnado de solemnidad. Los candelabros brillaban intensamente, proyectando destellos dorados sobre las antiguas paredes decoradas con los colores y símbolos ancestrales de Nigeria. Las banderas ondeaban suavemente desde los altos pilares, sus colores vibrantes contrastando con la serenidad de la multitud. Era un día histórico, uno que marcaría el inicio de una nueva era bajo el reinado de Makim Babatunde.Makim, sentado en el gran trono de ébano, observaba todo con calma, aunque en su pecho, el peso de la responsabilidad latía con fuerza. Desde que era un niño, había imaginado este momento, pero ahora, cuando realmente sucedía, la magnitud de la ocasión lo abrumaba. Su padre, el rey anterior, estaba a su lado, con una mirada de orgullo silencioso. Su madre, siempre elegante, mantenía su compostura, aunque una lágrima furtiva rodó por su mejilla. Su hermana, Zola, sonreía con calidez, aunque conocía bie
99 Carlota Epílogo I ¡Estamos en Las Vegas! Viken no bromeó cuando dijo que se casaría conmigo, así que en cuanto salimos de ese lugar lúgubre nos fuimos al aeropuerto. El hombre rubio tampoco mentía y si asistieron con nosotros él y su esposa, quién rápidamente se presentó. Llamamos a las chicas en el camino y como siempre me apoyaron en todo y prepararon una maleta súper rápido, Romi dejó a Lu con la suegra confiando en ella de nuevo, dándole un voto a ciegas, Mónica salió sin equipaje junto con su príncipe y nos encontramos en el aeropuerto una hora después. Conocí a la esposa del rubio en el avión y es la mujer más hermosa que he visto en mi vida, también están Mónica y mi Romi con sus parejas. Todos estamos con nuestras parejas y es algo bien loco y único de lograr. —¿Estás segura de querer casarte en Las Vegas? —me pregunta Romi. Nos vemos a través del espejo y le sonreí, a diferencia de otras mujeres yo no deseaba una boda enorme y mas de 500 invitados que apenas con
Narrador omnipresenteIgnati Volkov no entendía porque su esposa insistía en ayudar a un hombre que no le daría beneficios ni a corto ni a largo plazo.—Hagamos esto, quiero irme al hotel en menos de dos horas —ordena Ignati a su gente.—Gracias por hacer esto —repite como por centésima vez Viken.Ignati Volkov está a medio segundo de estrangular al tipo, pero sabía que eso a su esposa no le agradaría mucho, así que apretó las manos en puños y trató de controlas sus impulsos.—Sigue hablando y te lleno la boca de plomo —gruñó Ignati— puedo buscar quince maneras de matarte sino te gusta las balas —dijo en su idioma natal.—Deja al chico, solo estas molesto porque tu esposa te tiene agarrado por las bolas —se burla Mikhail.—Tú… —respiró hondo y lo dejo pasar o Angelie se lo haría pagar— mejor cállate, tú también estás agarrado por las pelotas.Esa mujer era más peligrosa de lo que Mikhail esperaba.—Luego de esto hay que volver a Rusia, tenemos muchas reuniones que no podemos pausar y
97 VikenSabía que algo tramaba, esa condenada mujer, será mi ruina como siga así.—Me puedes explicar ¿Dónde cojones está mi mujer? —le pregunté a Ivar en cuanto lo vi.Tuvo decencia de bajar la cara avergonzado, aun así se cuadro de hombros y empezó a hablar.—Ella tenía un plan, solo seguí ese plan —esa fue la excusa de él.—Te traje para que la cuidarás, no para que hicieras lo que ella quería —le reclamé.—Sabes tan bien como yo que, si no la ayudaba, ella lo hubiera hecho sola —me dijo mirándome a los ojos mientras mi furia menguaba un poco— ¿Qué hubieras preferido?Odiaba que tuviera razón, pero no podía pensar con claridad.—No podemos dejar que le pase nada, necesito que llames a Belikov para que me ayude —era lo único que se me ocurrirá.—Belikov no está disponible ahora, pero podemos llamar a alguien más —se veía misterioso—, pero es peor que deberle a Belikov.Su advertencia me hace pensar en solo un ser sobre esta tierra a la que Ivar se refiere.—No me importa, solo que m
CarlotaAmé mi sorpresa, ver el anillo me asegura que no fue un sueño, jamás pensé en casarme, no me veía caminando al altar con los hombres que salía casualmente, pero Viken desde un principio no fue casual.—Aun así, harás lo que tienes planeado —Ivar me habla de manera fría, no fue una pregunta, él sabe que estoy segura de mi plan.Y ahora más que nunca.No me tomaba personal la manera en la que me hablaba, hace mucho noté que él es así de frío e impersonal, tal vez cuando le llegué una linda mujer o la adecuada, allí dejara de ser un patán.—Así es, ahora estoy más segura que antes de ir tras esa mujer. No tengo porque frenar mi plan, esa mujer debe ser detenida, no soy tan frágil como ella piensa— le dije segura.«No dejaré que empañe nuestra felicidad» lo pensé, pero no lo dije.Mi padre siempre quiso un varón y mi madre una muñeca frágil para llevar a los certámenes de belleza, pero yo no era ni una cosa ni otra, pero aprendí un poco de ambas.Mi padre duró años llevándome a ca
Último capítulo