El árbol de NavidadPor Tomás Scott y Sarita Lester—Tommy, necesitamos convelcel a nuestros papis de que el albol de navidad sea pirante, ¡Pirante!—glito emocionada pol que se viene navidad.—Ay Sarita, se dice gigante no pirante, ya no estamos para hablar como bebés.—Ush, edes un incoldio, Tomás Scott— estoy doja como una manzana, me da velguenza, pedo es que aún me cuesta hablal.—No te enojes conmigo, mira que a mí también me costaba hablar, pero ya ves, ahora me sale de corrido.—¿Me puedes enseñal?—suplico con mi cala de coldelito.—Claro, seré tu maestro y tu mi aprendiz, mi pequeña Padawan.—¿Pada qué?—Tomy mueve la cabeza negando y me da una de esas sondisas que sólo son pada mí, es tan lindo y lo amo, algún día me casalé con él, pedo no se lo he dicho, eso jamás.Aún somos muy chicos pada pensal en matlimonio ¿no?—¿Qué hacen mis niños hermosos?—¡Mami!Mi mami Dani entra a la sala, junto a Jexi, mi pequeño hermanito, se ve tan linda con él en brazos, que mi corazón de peq
Leer más