Lo que Sofía no sabía, es que eran Delia y Carlos, la ex esposa y el ex amigo de su jefe, vestidos elegantemente y con una sonrisa en sus rostros. El corazón del señor López se detuvo por un momento al verlos frente a él, sonriendo como si no hubiera pasado nada. El dolor y la traición que había creído superar de repente volvieron con fuerza, envolviéndolo en una tormenta emocional. El corazón del señor López comenzó a latir más rápido al ver a Delia, su antiguo amor, y a Carlos, su ex mejor amigo, parados frente a él como si nada hubiera pasado. Las emociones se agolparon en su interior: dolor, ira, traición. ― Delia, Carlos... ―murmuró el señor López, luchando por mantener la compostura mientras las imágenes de aquel fatídico día en su mente volvían a aflorar. La vergüenza lo invadió al recordar cómo los había encontrado juntos en su propia cama, traicionando su confianza y amor. Aquellos momentos de felicidad y complicidad que había compartido con ellos se habían vuelto oscuro
Leer más