En la sala de la villa se sentía una gran tensión por parte de Isabella, en ese momento se acercó el mayordomo y dijo Señorita señores la cena está servida, Rubén se levantó y dijo: ¿piénsalo Isa con Sebastián y conmigo aquí se les hará más difícil atacarte, es mejor anunciar el compromiso lo antes posible?
Isabella bajo su rostro y dijo: ¡dame tiempo para pensarlo!
Luego Rubén miró a Sebastián y dijo: ¿y tú?
Sebastián dijo, ¡lo más pronto mejor!
Y caminaron al comedor, en la mesa del comedor estaba servida con ricos manjares, Rubén se sentó en el asiento principal mientras Sebastián se sentaba a su derecha e Isabela a la izquierda, al ver Sebastián qué estaban demasiado separados de ella se levantó y se sentó a la par.
Eso no paso desapercibido para Rubén y curvó sus labios en una sonrisa, luego puso un trozo de filete en el plato de Isabella y dijo, come está delicioso.
Sebastián arrugó su frente y tomó unos camarones, los peló y se los puso a un lado en el plato.
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