Una semana más tarde.

Hoy decidí ir al centro comercial más famoso de la ciudad en compañía de Karla para abastecer mi guarda ropa, ya que la mayoría de ropa que tenía la había dejado en casa de Caleb, puesto que esas prendas eran elegidas por sus empleados y no iban conmigo en lo absoluto. Sin embargo, mi principal prioridad para venir, fue para escoger las joyas que necesitaba para la boda. Luego de caminar, mirar aparadores, probarnos cosas y comprar algunas, decidimos que iríamos por algo de comer, estábamos muertas de hambre y ya era hora de hacer una pausa.

—Jamás superaré lo hermoso que es el collar que elegimos para ti. —Declaró Karla emocionada.

—Sí. Espero que a Lion le guste… —Respondí igual de emocionada que ella.

Finalmente, justo antes de entrar a mi cafetería favorita “Old Coffee”. Inesperadamente nos topamos frente a frente con un Caleb embobado, acompañado por la araña trepadora que eligió como mujer, los cuales venían saliendo de una tienda de novias, supongo que ven