LILIAN:

Me doy cuenta de que va a despertar y salgo corriendo, entrado en el baño y cerrando la puerta con llave. Hago el esfuerzo de recordar lo que pasó; lo único que viene a mi memoria son los labios de Alessandro sobre los míos en la ducha. ¿Y después qué pasó? ¿Lo hicimos? Espera, Lilian, tú eres virgen. ¿Lo soy? Tienes que tener alguna señal si perdiste anoche tu virginidad.  

Me reviso completa; me duele algo, pero no como si me hubieran penetrado. ¿Lo habré hecho con Alessandro? ¿Habré perdido la virginidad con él? No, no, no, de seguro me hubiera dolido. Aunque hay casos en que no les duele si están muy dilatadas. Se ha dado el caso de que, incluso, por la misma dilatación, hasta se quedan vírgenes. ¡¿Ay, Lilian, qué diablos hiciste anoche?! ¿Por qué siempre que te emborrachas te pasan