Capítulo 729
Las sirvientas, disfrutando de sus semillas de girasol, se reían en silencio.

Sylvia levantó la voz y llamó de nuevo:

—¡Raphaela! ¡Raphaela!…

De repente, se quedó en silencio.

Miró hacia abajo y vio cómo una mancha húmeda se extendía por las sábanas… Estaba tan alterada que había tenido un episodio de incontinencia.

Sylvia se quedó paralizada.

No podía aceptarlo, estaba abrumada por la vergüenza, y lo primero que pensó fue… no dejar que Luis se enterara. Si él supiera lo que había pasado, no podía imaginar cómo la vería.

No se casaría con ella.

Tenía que mantener esto en secreto, buscar un médico y recuperarse. Si se curaba, esto nunca habría pasado…

Luchó por mantenerse fuerte, pero al ver la mancha amarilla en las sábanas, no pudo evitar romper en llanto de humillación.

Al día siguiente, fue al hospital para un chequeo mientras Luis estaba fuera.

Aprovechó para hablar con el médico.

El doctor le dijo que con ejercicios de fortalecimiento del suelo pélvico, no habría mayores problem
Continue lendo este livro gratuitamente
Digitalize o código para baixar o App

Capítulos relacionados

Último capítulo

Explore e leia boas novelas gratuitamente
Acesso gratuito a um vasto número de boas novelas no aplicativo BueNovela. Baixe os livros que você gosta e leia em qualquer lugar e a qualquer hora.
Leia livros gratuitamente no aplicativo
Digitalize o código para ler no App