ANDROMACA
Se muy bien por lo que pasa y seguramente yo actuaria de esa forma, pero no puedo permitir que me trate de ese modo, cuando yo soy inocente de todo, tiemblo y lloro en mi puesto después de llamar a limpieza para que me colaboraran con el desastre que es su oficina.
es como si un vendaval hubiese pasado por ahí, con nombre propio, Stavros Sarris.
Recuerdo su mirada al confesarle lo de su madre y mis ojos se llenan de más lágrimas, tanta decepción, tanta tristeza en su expresión, tanto odio en su mirada, tanta ira en su cuerpo, esto está mal muy mal.
Dos hombres y una mujer llegan para limpiar la oficina, les ayudo en lo que puedo con dos cosas importantes encima mío, la carpeta de Bellanca y la memoria, no puedo perderlos de vista porque desconfió de Athenea, mi teoría es que se confabulo con esa mujer y ese hombre para robar los diseños de Bellanca.
Tengo tantas cosas atoradas, tantos sentimientos en contratados y todo se hace más pesado sin tener con quien desahogarme, solo