Le aclaré varias veces que yo no era una sumisa y que no era una relación dominante.
Solo que él tenía algún gusto, pero ella dijo que era obvio que lo era, solo que, como no estaba en el mundo, no podía notarlo.
Le expliqué nuestra relación por encima, pero lo que le confirmó que lo fuera era el tema de los besos.
“Aurora, no sé si te has dado cuenta… pero eso que describes NO es una relación normal. Eso es una dinámica D/s en construcción.”
“Hay un detalle que nunca falla para reconocer a un Dominante real:
no te toca, no te besa, no avanza físicamente… hasta que tú te entregues emocionalmente.”
“UN DOMINANTE DE VERDAD NO BESARÁ A SU SUMISA HASTA QUE ELLA SE ENTREGUE.
Porque el beso, para él, es rendición. Es pacto. Es vínculo.”
“Tú crees que te está frenando… pero no, cielo:
te está midiendo. Te está leyendo. Te está esperando.
El beso en una relación D/s no es el inicio.
Es la confirmación.”
“Si él está evitando el beso, es porque ya decidió el rol que quiere contigo.
Y es