C90 - Fue por las pruebas.
Cuando Eva despertó, se encontró en un lugar frío y oscuro. La confusión la invadía, y el dolor en su abdomen era abrumador. Intentó moverse, pero el dolor era intenso.
— ¿Dónde estoy? — susurró, sintiendo que la realidad comenzaba a desvanecerse nuevamente.
— ¡Eva! — escuchó una voz que la llamó, y sintió que algo dentro de ella se encendía. Era Gabriel —. ¡Eva, por favor, responde!
La voz de Gabriel era como un faro en medio de la tormenta.
— Gabriel… — murmuró, esforzándose por abrir los ojos.
— Estoy aquí, estoy aquí — dijo él, acercándose a ella, su rostro lleno de preocupación —. No te muevas. Estás herida.
— ¿Qué pasó? — preguntó Eva, sintiendo que la confusión la invadía nuevamente.
— Te dispararon — respondió Gabriel, su voz temblando, y Eva sintió que el miedo la envolvía —. Te encontré en el suelo, y llamé a una ambulancia. Estás a salvo ahora, solo intenta mantenerte despierta.
La realidad de lo que había sucedido comenzó a inundar su mente. Recordó el tiro