Capítulo 3.

Mientras los lobos me escoltaban fuera del territorio, pensé en que había perdido la oportunidad de hablar con la Luna Suprema.

Lo pensé por algún tiempo y quería hacerle una pregunta: ¿Era necesario tener un Alfa para ser una Luna? Vaya, no estaba segura de querer poner a cualquier macho al frente de mi manada. Una manada en la que había trabajado arduamente para ver florecer.

Desde el año anterior papá me estuvo presentando a algunos machos de otras manadas que él consideraba "aptos" para ocupar su puesto. En consecuencia, eran candidatos a ser mi pareja.

Sin química, chispas, mariposas... todos esos machos pasaban desapercibidos para mí. Tanto que había llegado a la conclusión de que quizás un Alfa no fuera tan necesario.

Yo podría encargarme del papeleo, de las relaciones públicas con otras manadas, hacer presupuestos, conseguir dinero, asignar el patrullaje y el entrenamiento. Prácticamente yo podría ser mi propio Alfa si papá ya no estuviera en el cargo.

Sonreí para mi
Sigue leyendo este libro gratis
Escanea el código para descargar la APP
capítulo anteriorcapítulo siguiente

Capítulos relacionados

Último capítulo

Explora y lee buenas novelas sin costo
Miles de novelas gratis en BueNovela. ¡Descarga y lee en cualquier momento!
Lee libros gratis en la app
Escanea el código para leer en la APP