Capítulo 118: No te voy a perdonar.
Kathia sintió la tensión que emanaba de Giovanni. Ella avanzó un paso, acortando la distancia entre ellos, y lo abrazó con fuerza.
—Le mentí al idiota… ¿Cómo puedes desconfiar de mí? ¿Sabes cuánto me duele?, Gio… Te elegí a ti —levantó la mirada, casi suplicando en silencio que él le prestara atención. Giovanni la miró, sus ojos fijos en los de ella—. Te elegí, mi amor. Te elijo, y siempre te elegiré… —Se puso de puntillas y se aferró a su alto cuerpo, besando sus labios suavemente. Al principio, él no correspondió.
Él la observaba, como si intentara descifrar cada palabra, buscando la verdad o la mentira en su mirada.
—¿No me crees? —preguntó Kathia, su voz quebrándose.
—Te creo —respondió Giovanni, besándola de regreso. Se detuvo por un momento, sus labios a centímetros de los de ella—. Lo siento, y…
—¿Y…? —preguntó ella, disfrutando lentamente del sabor de sus labios—. Tengo que desnudarte, no me gusta que huelas a tabaco… Es malo para mis bebés.
—Nuestros —la corrió él, qui