(POV: Ishtar)
La sombra se alzó sobre nosotros.
No hubo tiempo para respirar.
El segundo coloso ya estaba encima.
Placas negras que absorbían la luz.
Movimientos más veloces.
Más precisos.
Más mortales.
El golpe no me alcanzó.
Pero el impacto barrió el suelo a mis pies.
Rodé entre polvo y escombros, el hombro ardiendo por el roce de una losa.
Había estado a punto de morir.
Otra vez.
Si Mike no hubiera aparecido…
Yo no estaría aquí.
Me levanté jadeando, con los brazos temblorosos.
—¡Gracias! —grité.
Él no respondió.
Solo crujió el cuello, encaró a la criatura… y murmuró:
—Otra vez no.
*****
(POV: Mike)
Esta bestia no vino a rugir.
Vino a matar.
Casi el doble de rápido que el anterior.
Y sin aviso.
Me planté frente a ella.
Activé el tatuaje.
El Orvium se deslizó por mi piel como lava viva, endureciéndose con un resplandor opaco.
Sus brazos descendieron como martillos de demolición.
Yo levanté los míos.
El choque fue brutal.
El suelo bajo mis pies se agrietó.
Mis huesos crujieron.
Pero n