Capítulo 39

―Pero, señor Clarkson, nuestra tienda es exclusiva―le responde, como si eso lo explicara todo― ¿cómo la podemos hacer exclusiva, si no alejamos a la gente indeseable? ―indica, pero se arrepiente al minuto siguiente, por la manera en que Dylan la está mirando ahora.

―Y yo creí que te quedaba claro que la manera en que la hacíamos exclusiva la boutique era mediante nuestros precios―le dice muy molesto―no espantando a clientes con el suficiente dinero para comprarlo―le asegura y ella traga en seco.

―Pero, si no cuidamos a quién le vendemos, mucha gente se puede ofender―señala y el señor Clarkson mueve su cabeza de lado a lado, así que añade―nuestra ropa no la debería usar la servidumbre―dice, la muy descarada.

―Primero, todo el mundo sirve a alguien más, porque, si yo no le hago caso a mis clientes y socios, ellos no estarán satisfechos conmigo y no podré vender―le indica y ella parece que no le está gustando lo que le está diciendo―y, segundo, como pudiste darte cuenta, no puedes juzgar
Continue lendo este livro gratuitamente
Digitalize o código para baixar o App

Capítulos relacionados

Último capítulo

Explore e leia boas novelas gratuitamente
Acesso gratuito a um vasto número de boas novelas no aplicativo BueNovela. Baixe os livros que você gosta e leia em qualquer lugar e a qualquer hora.
Leia livros gratuitamente no aplicativo
Digitalize o código para ler no App