El nuevo Ceo.
Me paré en la puerta de la habitación de mi hermana después de ver salir a Agustín.
—Te lo tenías bien guardado pilluela— le digo besando su carita y sonriendo, por lo visto aquí alguien me ha estado escondiendo algo.
Me siento como todos los días para contarle a mi hermanita cómo van las cosas y tomo su mano para que toque mi vientre, mi bebé se mueve como loco y eso me alegra mucho pues desde que lo hice la primera vez sentí la conexión que nacía entre estos dos seres que tanto amaba.
—Ves hermanita, hasta porotito quiere ya conocerte, apresúrate a despertar o ya será un viejo o una vieja cascarrabias y no quiero que te pierdas más de este maravilloso proceso.
Hoy, me tengo que ir temprano, pues mi niño bonito asumirá su cargo como Ceo de la constructora y tengo que ponerme bella para la ocasión.
¿Creerás que el muy hijito de su mamá quiere que vuelva a usar el color morado en mi cabello? Ese hombre está loco, si vieras lo que me dijo cuando me vio, si me dijo que parecía algodón de