Beverly mantuvo la postura seria y el rostro indignado mientras bajaban por el ascensor. Estaba segura de que esto le ganaría la confianza de Daniel nuevamente, se libraría de la culpa y ahora que Deanna lo había dejado, al fin tendría su oportunidad. Pero debía seguir siendo cautelosa.
Cuando llegaron a la oficina del jefe de seguridad todos se sorprendieron, rara vez el dueño bajaba hasta ese sótano.
- Buenos días, Sr. Colins –
- Buenos días, Sr. Crusher ¿Qué lo trae por aquí? –
- Necesito hacerle unas preguntas sobre las cámaras de seguridad que están restringidas en el piso superior. Recientemente hubo un acceso a las grabaciones de esas cámaras y quisiera saber qué fue lo que ocurrió –
- Eso es imposible, esas grabaciones están bajo llave –
- Pues ocurrió y necesito saber quién y cómo –
- Entiendo, acompáñeme por aquí por favor –
Lo llevó hasta una habitación lateral. El Sr. Colins se quedó esperando.
- ¿Qué sucede? – Preguntó Daniel.
- Necesita pasar su credencial para entrar a