—¡Realmente eras un niño extremadamente adorable! Y tu mamá era increíblemente hermosa. Sin duda la belleza de los Rosenthal ha bendecido a tu familia— dice ella con dulzura.
Estoy realmente asombrado del tiempo que ella ha tomado, simplemente sentándose aquí conmigo a ver las fotos de mi infancia. Es evidente que tengo buenos recuerdos como todos, quizás aunque algunos no sean tan memorables o felices. Sin embargo, a los ojos de mi esposa, ella no parece ver nada más... ella simplemente me ve a mí, observa mis posturas y supone mis intenciones y mis ánimos.
Aprecia la sonrisa de mi madre y pequeños detalles como la forma en que me sujetaba o cómo me observaba cuando caminaba cerca de ella. A los ojos de Lisa mi historia parece tan diferente y yo estoy francamente deleitado.
Si, sin duda, mi madre hubiese adorado mi elección de esposa, aunque… las razones no hubiesen sido las correctas. ¿Qué posibilidades tenía de salir yo tan favorecido en un matrimonio por contrato?
Terminamos