Mundo ficciónIniciar sesiónRubí, con el pañuelo de seda cubriéndole la cabeza, se sentía ligeramente protegida bajo la presencia de Marcus. A su lado, por primera vez desde que todo comenzó, sintió algo parecido al alivio. Sin embargo, los reporteros seguían siendo una sombra molesta que no la dejaba respirar.
Gavin y el conductor ocupaban los asientos delanteros, mientras otros tres guardaespaldas los seguían en un segundo vehículo. Aun así, los paparazzi no se daban por vencidos: los perseguían en auto, lanzando destellos de cámara sin descanso.
Cuando el coche arrancó, los vidrios polarizados subieron. Rubí, aunque aliviada, mantenía la cabeza gacha, el rostro oculto bajo el pañuelo. No se atrevía a mirar a Marcus. No sabía cómo explicarse… ni por dónde empezar.
Solo pensar en las fotos la hacía estremecerse.
Si las posiciones se






