Owen sigue a Ethan hacia el ascensor, el cual se abre enseguida y los dos hombres entran. El mayor intenta abrir la boca, pero una mirada de su hijo lo hace callar.
—No iniciaré una pelea en el elevador, espera a que lleguemos a tu piso y mandas a tu secretaria lejos, porque tampoco me voy a encerrar en tu oficina.
—Allí nadie nos molestará.
—Sí, pero es más difícil de escapar —sisea Ethan y Owen sólo mueve la cabeza de manera reprobatoria.
Abajo, Kate sale de su despacho con la misma actitud de siempre, con documentos en la mano y se pierde por la escalera para subir hasta el siguiente piso y luego ir hasta el piso veintitrés. Necesita saber qué demonios pasa entre su esposo y el CEO, porque esa relación tan «cercana» no le gusta para nada.
Una vez que llega al piso superior, llama el ascensor y sigue el resto del trayecto hacia la verdad.