Juliette
Miro la hora en el reloj y me sobresalto al darme cuenta de que tengo menos de cinco minutos para estar lista o, de lo contrario, llegaré tarde.
Me observo unos segundos frente al espejo, indecisa, hasta que finalmente opto por dejar mi cabello suelto, al natural. Creo que ya es tiempo de salir de mi zona de confort y lucir un poco diferente.
Hoy, por primera vez, después de los meses tan horribles que he pasado, me siento genuinamente bien. Han transcurrido dos meses desde mi primera consulta con el doctor Nolan y puedo afirmar que, si he tomado una buena decisión en toda mi vida, ha sido la de aceptar ir a terapia.
Si no hubiese contado con su ayuda, no sé qué habría sido de mí. O, al menos, no sé si hubiera sido capaz de salir de esa cueva llena de oscuridad, tristeza y desolación en la que estaba atrapada.
Hoy, de pie frente al espejo, por primera vez en mi vida reconozco la mujer increíble, hermosa, fenomenal, valiosa, capaz, inteligente e inestimable que soy.
No merezco