LA AMANTE VIRGEN. CAPÍTULO 51. CAPÍTULO 51. Escape frustrado
LA AMANTE VIRGEN. CAPÍTULO 51. CAPÍTULO 51. Escape frustrado
Callie estaba furiosa. Apenas había salido del tribunal, con los guardias obligándola a marcharse, pero la rabia ya se había apoderado de ella. No podía creer lo que había pasado en esa sala. ¡¿Cómo había sido posible que todo se volteara en su contra de esa manera?! Y, sobre todo, ¡¿cómo era posible que ese maldito abogado, Lieberman, hubiera descubierto su cuenta en Suiza?!
Y como si quisieran darle el último golpe, sus padres se le unieron fuera del Tribunal. O mejor dicho, su madre se le unió, porque Conrad Pearce estaba a punto de estallar.
—¡No puedo creerlo! —escandalizaba—. ¡No puedo creer que hayas perdido la mitad de la fortuna de mi madre! —gritó, aunque evidentemente eso no era lo único que le molestaba—. ¡Arregla esto, Callie! ¡Arréglalo de alguna manera o te juro que entonces te las vas a ver conmigo!
Conrad se alejó de allí lleno de rabia, y su madre se giró hacia ella.
—¡No le hagas caso, solo está frustrado!