Capítulo 136. Un sueño falso.
La luz del sol se asomaba por la ventana de cristal anunciando un nuevo amanecer.
Los cantos de las aves eran cada vez más fuertes hasta que finalmente lograron hacer que Ximena abriera los ojos.
Extendió sus brazos y también todo su cuerpo mientras cerraba los ojos.
—Fue una noche sensacional—, dijo Ximena para sí misma antes de recostar su cabeza sobre la almohada y mirar el techo de esa elegante habitación.
Fue entonces cuando escuchó una respiración justo a su lado sobre la cama.
Ximena abrió sus ojos en su máxima capacidad y trató de recordar con quién había pasado la noche. Pero, no lograba recordarlo.
Miró lentamente con miedo del rostro que se encontraría. Sin embargo, se encontró con la espalda desnuda de un hombre que dormía profundamente.
—¿Qué hice?—, exclamó Ximena en voz baja para no despertar a su acompañante.
Levantó su mano y la puso suavemente sobre el brazo del sujeto para jalar su cuerpo con cuidado y hacer que se diera vuelta.
Logró ver el rostro del hombr