—Lily, ¿estás tratando de darle un regalo a todos, o quieres beneficiarte a ti misma? ¿Acaso mi desfile no es lo suficientemente emocionante para mantener a la gente atenta? —Jessie fingió desagrado, bromeando con la presentadora.
—Jaja, parece que mi pequeña idea no puede escapar a tus ojos tan agudos. El desfile es emocionante, pero quiero ver algo aún más emocionante —respondió la presentadora, girando hacia el público para animar el ambiente—. ¿No es cierto, todos?
No hubo mucha respuesta del público, porque Ava había dicho que el invitado misterioso era solo un truco, y la gente no estaba interesada en sorpresas a mitad del evento.
Aunque la atmósfera no se levantó, el evento debía continuar.
Jessie dijo generosamente:
—Está bien, si todos quieren una sorpresa, debo organizarla.
La presentadora continuó:
—Entonces, señorita Jessie, ¿cuál será exactamente nuestra sorpresa?
Jessie guardó silencio por un momento, luego miró al público, tomando nota de todas las miradas.
Después, con