Capítulo 12.

Martes 24 de mayo de 2022.

Narra Noah.

Ahora cuando cierro los ojos lo único que puede mi mente ejecutar son imágenes consecutivas que me llevan desde el día Cero, hasta un número indescifrable.

El día Cero fue cuando la vi llegar al salón en nuestra primaria; con una coleta alta, ojos saltones profundos, algo nerviosa pero al mismo tiempo determinante. Desde ese día jamás paré de verla.

Y ahora ya no podré verla nunca más.

El corazón se retuerce en los restos de mi piel ardiente.

Estoy en el número indescifrable de dolor.

La noche en la que Peitton me dijo aquello pensé que era una m*****a broma. Que, al final, Abigail sí había resultado tan malvada, al punto de jugar de esa forma conmigo para que la olvidase. Pero su cuerpo sin vida en esta urna que veo y no he dejado de tocar es lo más real y doloroso que mi tacto ha sentido.

Tan real como el hecho de que sé que jamás tendré una vida después de esto.

—Es hora —Mi madre me toma el hombro, yo la aparto con sutileza.

La mirada que no he dejado de sentir desde que llegué al cementerio me hace ver de reojo. Un cabello pelirrojo se b**e con el viento y desaparece, ahora no hay nadie. Quizás solo estoy divagando, es razonable que lo haga ahora cuando me aparto tras la mirada de sus padres, del rezandero, y veo cómo poco a poco la llevan a ese oscuro lugar.

Respiro hondo y con las pocas energías que mi cuerpo tiene intento abalanzarme sobre ella, pero unos brazos rubios me toman como camisa de fuerza cuando mis lágrimas y el grito interno es incluso perturbador para lo que queda de mí.

—¡Noah! —Mi madre me toma la cara y me hace verla a los ojos, aunque es poco lo que puedo ver ahora —Hijo vas a superar esto, bebé, lo harás. Ella estará bien.

—¡Pero yo no! —Grito soltándome de los brazos de Peitton, quien me ha traído lo suficientemente lejos del "peligro" —¡Ella tampoco debe estar ahí, mamá! ¡Ella tiene que estar conmigo! —Señalo mi pecho y no puedo evitar golpearme —Tenía que estar conmigo, yo la hubiese podido proteger, yo.... Abigail no... por Favor —Me derrumbo en la grama —La amo  mamá, siempre la he amado ¡Ella no puede hacerme esto! ¡Nadie tenía derecho de quitármela!

—Hermano...

—¡Si no vas a ayudarme a saber quién fue el responsable no quiero que me hables! —La furia crece con dolor en mí porque nadie parece hacer su trabajo para saber quién le hizo esto —Porque ella no... ella no puede estar ahí, no...

No puedo seguir hablando porque mis cuerdas vocales se ven interrumpidas constantemente por el sentimiento devastador de su partida física.

El amor de mi vida se ha ido, y me ha llevado con ella.

...

Junio de 2022.

—Gané.

—No me interesa.

—Noah...

—¡Déjame en paz!

—Hermano... —Natanael se acerca a mí y no puedo evitarlo cuando me abraza, porque duele —Lo siento mucho, Noah...

Lloramos juntos y creo que es lo único que puedo hacer bien últimamente.

—No tenías que venir —Le hago saber, frente a frente.

—¿Bromeas capitán Kowalski? Jamás voy a dejarte solo, hermano.

¿Cómo le explico que aunque hayan personas a mi alrededor me siento más que solo? Sin vida.

Julio de 2022.

—¡Prometiste que me ayudarías! —Grito, desesperado.

—Noah... —Él me ve con tanta pena que me enfurece —Se sabe la causa de muerte pero... habían muy pocas evidencias y...

—¡La tiraron como basura en el camino, Peitton! —Grito con dolor —La dejaron como una cualquiera, ¡quién sabe qué le hicieron! ¡Qué fue lo último que vio!

Le doy una patada a la puerta de su coche y lo hundo la segunda vez que descargo mi ira ahí.

—Amigo… lo siento.

Es inútil.

—¡Nunca lo vas a entender! ¡Ella solo era la tipa con la que te ibas a la cama sabiendo que tu amigo, tu "hermano", estaba enamorado de ella desde la infancia!

—Noah... sabes que no...

—Siempre has sido un hipócrita, así que no pienso esperar más nada de ti.

—Noah…

—No me vuelvas a buscar —Escupo sus zapatos.

No puedo creer que en serio esto se vaya a quedar así.

El rumbo en mi motocicleta vaga solo hasta aquél sitio, entro, han cambiado al tipo enano de la puerta, así que sin problema me siento cerca de la barra para pedir un par de tragos.

No hay nada que pueda hacerme daño ya.

—¿Desea otra ronda especial? —Me cuestiona el bartender.

Pienso asentir, porque desde que comenzó el mes he parado casi todos los días aquí, tomando cócteles especiales, con una botella en mano y algunas pastillas en mis bolsillos que puedo hacer polvo e inhalar en el baño.

No sabía que se podía vivir sin dolor. Cuando estoy en ese estado eso desaparece porque me pierdo en un mundo en donde ella está conmigo y no a metros bajo mis pies.

—Hola guapo... —Una rubia llega saludando —No, el caballero no va a querer ronda especial hoy.

La analizo porque me parece ofensivo que tome decisiones por mí, pero mis ojos se expanden cuando sé que es ella. La que me dijo que buscara en su casa cuando vine y fui golpeado. Ella la conoce.

—¿Seguro? —El de la barra cuestiona hacia mí.

Veo a la mujer asentir con un gesto serio y me señala hacia alguna parte por lo que después de asentir hacia el bartender la sigo.

Veo mi reflejo en uno de los grandes espejos en donde las luces neón chocan al ritmo de la música electrónica y me sorprende no reconocerme.

Es increíble lo mucho que he cambiado en dos meses.

—Te he visto seguido por aquí... —Ella me toma el brazo ante la mirada de unos hombres que se encuentran custodiando una zona privada, los cuales nos dejan entrar —Supe todo. Y sé que vienes en busca de respuestas.

—No me interesa saber qué hacía aquí.

Yo solo la quiero a mi lado.

Lamento rápido haber rechazado el cargo especial del bartender cuando ella me toma la camisa tras la mirada de otro hombre y me arrastra por el pasillo oscuro.

Las luces de colores se encienden a nuestros costados cada tres segundos.

En cada habitación hay una pared de vidrio que me muestra con sorpresa y bastante explícita, escenas de tríos, parejas y un montón de cosas que solo me dejan la boca seca.

La rubia me jala hasta hacerme ver un cuarto específico.

—Este era su hogar. Era la reina del lugar.

Las luces están apagadas por más tiempo y encendidas por menos, pero cada que me acerco a detallar lo que ocurre porque la curiosidad y el dolor me invaden, retrocedo porque la cara de un hombre pega constantemente al vidrio, jadeante, adolorido.

El corazón se me acelera sobremanera, la música desaparece y solo puedo ver con concentración al hombre, en los escasos segundos que me permiten, ser dominado por una mujer morena con traje de cuero que pronto se da cuenta de mi presencia, la disfruta, y ello rápido se transforma en una pesadilla.

Veo a Abigail pasar la lengua por todo el vidrio dejando saliva, dándole un fuetazo a un hombre sin rostro amarrado el cual lo disfruta.

Cierro los ojos intentando recordarla en mis brazos, tímida, desprotegida y dulce, pero la imagen que aún tengo a mi frente me sobrepasa cuando la luz se queda encendida y veo a otro hombre tomándola por el cuello con fuerza para introducirse detrás de ella.

El ardor en mi cuerpo junto con el sonido del vidrio romperse y la sangre brotando de mí cuando con fuerza me deshago a golpes del idiota que la tiene, es lo único que puedo sentir.

Escucho gritos, tomo al otro idiota y el golpe que estampo sobre él chispea en las piernas de la morena que al verla llora sin control.

Justo cuando me doy cuenta de lo que he hecho recibo una descarga eléctrica en el cuello que me deja inmóvil y con la última imagen de Abigail sonriéndome por primera vez en el colegio.

—Por favor no te vayas...

Todo es oscuro.

...

Agosto de 2022.

—Ya no sé qué haremos con él...

Papá cree que no lo escucho porque piensan que estoy lo suficientemente perdido en mis vicios como para ser consciente.

—No ha pasado nada de tiempo... le duele —Mi madre habla.

—¡Hace un mes tuve que sacarlo de prisión por casi matar a dos tipos desnudos, por todos los cielos! No me digas que no ha pasado nada de tiempo ¡porque lo ha malgastado en beber, y hacerse un idiota!

—¡Era el amor de su vida, estúpido! —Ella le grita —¡Tú le comprabas esos chocolates para que se los regalara a ese muchacha! ¡Yo leía sus cartas antes de que se las enviara! ¡Ambos sabemos lo importante que era esa chica sea como fuese para nuestro hijo! ¡No puedes pretender que de la noche a la mañana olvide o supere a la única mujer que logró conquistar el maravilloso corazón que tiene mi hijo!

Hay silencio en palabras, pero sollozos de mamá. Unos que me contagian y me hacen sentir lágrimas cayendo por mis cachetes.

—Que haya perdido al amor de su vida no lo justifica. Solo míralo, mujer, ¡míralo!

—Lo veo; devastado. Y lo entiendo.

—¿Lo entiendes? —Papá suelta una risa que me disgusta —De los dos fui yo quien perdió el amor de su vida cuando esta decidió revolcarse con o....

—Quiero ir a nadar, mamá —Digo, con un nudo en la garganta, alto y fuerte.

Rápido me encuentro en la camioneta de mi madre después de que me obligara a bañarme, tomar café y comer una ensalada.

Paré en el hospital en donde trabaja mamá después de que ingiriese algo que rima con Xima, y no paré de reírme mientras ella me daba sermones.

—No me estaba riendo anoche por tu regaño —Juego con el botón de la ventana como cuando era un niño —Es que estaba buscando la forma de irme, y no esperaba volver siendo precisamente regañado por usted.

Mi madre detiene la camioneta y no soy consciente de lo que he dicho cuando ella de la nada llora sin consuelo alguno.

—¡¿Cómo puedes decirme esto?!

Ni yo mismo sé.

Minutos después de que se calmara la vi tomar su teléfono y textear.

—¿Estás hablándole a tu novio?

—Noah.

—Papá no te va a perdonar.

—¿Y tú?

Giro mi cabeza hacia la carretera y pronto tengo la vista del club en donde mis padres son copropietarios.

—Gracias por... —La detengo cuando veo que quiere bajar también —Yo puedo ir solo, mamá.

Ella parece querer negarse, pero con ojos llorosos lo entiende, por lo que me susurra un Te Amo lleno de bastante inseguridad cuando la veo perderse de vista.

Sé que puede tener acceso a las cámaras de este lugar pero no me preocupa.

Algunos trabajadores me conocen desde niño y fingen no estar sorprendidos cuando paso por sus lados sin siquiera saludar.

He aprendido que los modales no sirven de nada en esta vida. Todo lo que viví, todo lo correcto que intenté ser siempre, no valió, vale o valdrá la pena. Porque lo único que estaba esperando al menos a cambio de ser tan buen chico era ser correspondido de la forma correcta, y más importante aun: poder tener a la mujer que amo a mi lado. Y nada de eso ha sido ni será posible.

La zona de la piscina está sola y agradezco eso.

Me quito la ropa quedando solo en bóxer y cuando el agua tibia rebasa mi cuerpo me dejo flotar encima de ella mirando el techo azul.

El diario que conseguí me hizo saber que muy a pesar de sus planes, Abigail estaba enamorándose de mí.

Y no he podido dejar de pensar en el momento en el que ella me dijese, con esos ojos que me encantan aún, con esa sonrisa dulce, que estaba enamorada de mí. Que me quería, que... que había arruinado su juego porque siempre estuvo atada a mí pero estaba demasiado ciega y dolida para notarlo.

En ese diario descubrí que ella es un misterio porque la razón de no haberme podido confesar a tiempo lo que sentía por mí, se debía a algo mucho más grande que nosotros mismos.

La maldad.

Nadie me podrá quitar eso de la cabeza.

Recuerdo su cuerpo en esa caja, siendo enterrada, la respiración se me pierde en las partículas del agua en cuanto me dejo hundir.

Recuerdo su piel rozando con la mía, esa sonrisa que me hacía pensar que jamás iba a tener que volver a sufrir porque finalmente la tenía conmigo.

Pero el resumen de estos cinco meses que han pasado desde la última vez que la vi con vida, es que no puedo estar en un lugar en donde ella no exista.

Cierro los ojos con la imagen de ella recibiendo mis cartas, de ella cuando me besó por primera vez, y de ella tocando el cielo conmigo por vez primera; así que decido quedarme allí, porque es donde ambos merecemos estar, juntos.

KFM

¡Hola hola! Gracias a todos por el apoyo. Creannos que no es fácil para nosotras hacerlos sufrir tanto, pero viene más drama :"( Déjennos saber su opinión sobre la historia en los comentarios, ¡los amamos!

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