La diosa bruja Isfet desapareció en un instante, pero también lo hizo su lobo Mat. Isis lo buscó por todas partes, pero no lo encontró. Se detuvo al escuchar voces, se concentró hasta lograr definirlas bien y comenzó a escuchar la inconfundible voz de su papá, que hablaba con alguien. Lo escuchó preguntar:
— ¿Resultó, Teka?— ¡No sabemos, mi amigo! ¡Al menos logramos sacar a Isfet de su cabeza! Aunque no logramos hablar con ella para enseñarle qué hacer —respondió Teka.Isis no entendía de qué hablaban, su mente estaba llena de preguntas: ¿Quién era Isfet? ¿Era la bruja que le había hecho daño a su lobo? ¿Qué hacía en su cabeza? Pero quiso seguir escuchando de qué hablaban para ver si entendía lo que estaba sucediendo.— ¿Ast, está bien? &mda