22. ¿Verdad o atrevimiento?
Debía pensar... Joder, ¡piensa Peter! o al menos intenta arreglarlo.
—Sabes que nunca te he juzgado y no lo hago ahora —dije buscando mejorar su ánimo, pero parecía hacer el efecto contrario a mi parecer.
—¡Ya sería el colmo! Si te hubieras atrevido, este encuentro nunca se hubiera llevado a cabo. Bueno... ni este ni ningún otro —soltó tajante haciendo que me arrepintiera de lo que había dicho al instante.
—Ya... No es la primera vez que me lo dices, y me va quedando claro.
Suspiré con resignación, pues aquello no iba ni medianamente tan bien como podría esperar.
—¿Sabes qué Peter? No tenemos por qué hacernos esto —contestó acercándose mucho a mi cara, tanto que pensé que recibiría un beso de consolación, al menos —. Podemos seguir nuestros caminos como si nada hubiera pasado, sin pretender nada el uno del otro, como viejos amigos, conocidos o como prefieras llamarlo.
Pero ¿qué me estaba diciendo? ¿Amigos, conocidos? ¿En serio? Ahora se encogía de hombros como si no pasara