Según el expediente, podría calificarse como lesiones de primer grado, incluso de segundo grado grave.
La clienta podría ser acusada de lesiones intencionales.
En su situación actual, iniciar un proceso de divorcio le sería muy desfavorable.
Además, según el registro de declaraciones, incluso la policía había clasificado el caso como "riña o confrontación violenta".
Sebastián se recostó en la silla.
—Dime qué opinas.
Luciana reflexionó unos segundos y luego respondió:
—Por lo que leí, no hay base suficiente para considerarlo una riña colectiva. Estaba pensando que quizá podríamos manejarlo en dos fases.
—Abogado Sebastián, mire, la clienta quiere divorciarse y obtener una parte de los bienes matrimoniales. Pero con una acusación por lesiones intencionales, eso sería muy perjudicial para ella. Entonces pensé que lo mejor sería primero resolver el asunto penal. Que ella intente firmar un acuerdo de conciliación con la otra parte. Una vez resuelto eso, entonces sí iniciar el proceso de di