- Emma, apúrate - Eva apuraba a su hermana mientras espiaba a la sala del departamento de Rose por una fina apertura entre la puerta y el marco - ¿Qué te demora tanto?
- Es que no me podía prender la campera - Emma rio por lo bajito, a diferencia de Eva que se sentía ansiosa, ella estaba entusiasmada.
Eva la miró de reojo.
- ¿Te trenzaste el cabello?
- Sí, mamá me enseño, ¿Te gusta?
- ¡Emma! - grito por lo bajito - estamos apuradas y tú te pones a trenzar tu cabello
- Es para ser más eficiente - levanto las cejas - ¿Cómo vamos a escabullirnos si se nos enreda el pelo al salir? Tenemos que estar cómodas.
- ¿No quieres que te lo corte? - Eva se giró hacia ella con una tijera entre las manos.
- ja, ja, ja - rio nerviosa - no es necesario hermana.
-¿Seguro? Será más eficiente dejarte pelada, así no se te vas a enredar el pelo ni tendrás que demorarte en trenzarlo.
- ¿No estamos apuradas? ¡Vamos! Hablaremos sobre eso a la vuelta - Emma se coló entre Eva y el marco de la puerta.
Caminaron e