Para el momento en que su hermano la ubicó cada uno tenía una noticia impactante para el otro.
–Hermana, el abuelo falleció.
–Hermano, estoy casada con Ignacio Remington.
–Conozco a Ignacio, ¿en serio te casaste con él?
–Sí, estamos muy enamorados.
–¿Cómo lo conociste?
–Trabajo con él. Pero dime, ¿qué le pasó al abuelo?
–Un infarto, pero… &ique