El niño estaba muy orgulloso mostrándole cada pieza militar que tenía en su colección, pero fueron interrumpidos por Jenya quien entró a la habitación diciendo:
–Hijo, debo bañarte y hacerte dormir unas pocas horas, a las seis debemos estar en pie para llevarte al colegio e irme a la universidad.
–¿Estás estudiando?
–Sí, estoy terminando mi carrera de diseño interior, necesitaba algo más sólido para ofrecerle una mejor calidad de vida a mi hijo.
–Eso es muy loable de tu parte, estudias, trabajas y eres madre soltera, ¿cómo lo haces?
–Bueno, cuando salgo de la universidad voy a trabajar y la hora de descanso la utilizo en buscar a Eliel a su colegio y lo traigo donde la señora Smith que me lo cuida todas las tardes, él es muy aplicado y hace solito su tarea, así que yo solo debo revisarla o reforzarle algo cuando llego en las noches.
–Adiós amigo, iré a bañarme –dijo el niño extendiéndole su manito a Ben.