Capítulo – El Lobo Sin Título

Gael ya no era nada,

nunca fue el Alfa Legítimo

Y ahora, con más razón, ya no era nada.

La manada lo sabía.

Él también.

El único Alfa legítimo, Khael Lorentz, había vuelto a tomar su lugar. Su rugido ancestral, su voz de líder, su presencia inquebrantable devolvieron el equilibrio a la manada rota. Él era el padre de Nayara, la loba desterrada, la loba que regresó no solo con la verdad… sino con fuego en la mirada.

Y él, Gael, el joven que había amado a Nayara y la había condenado por una mentira, no tenía ya ningún título que lo protegiera del juicio. Ni siquiera el de hijo de Alaric, ese padre que nunca fue un verdadero Alfa. Un hombre débil, manipulado, cobarde.

Ahora estaba solo. Sin poder. Sin perdón.

Desde que la verdad se supo, desde que la oscuridad fue expulsada junto con la bruja que reinaba tras las sombras, Gael ya no podía dormir. No porque no pudiera… sino porque sentía que no merecía el descanso.

Vivía con Nayara a unos pasos de distancia