Mundo ficciónIniciar sesiónKira Santoro
Una semana después
Mamá ajusta mi vestido mientras que mi tía Zaria terminaba de retocar mi maquillaje. Mi prima Alice miraba toda las pulseras, anillos, aros y collares que tenía para ver cual podria usar este día.
El día de hoy sería mi compromiso con Jared.
Papá me había explicado que en un mes más seria la boda, la celebrarian en Los Ángeles así que tendría que viajar hacia allá en unas semanas más.
Mamá me mira a través del espejo y hace una mueca, frunzo el ceño confusa y ella evita mi mirada para fingir que estaba enfocada en terminar de ajustar mi vestido.
Tía Zaria le da una mirada a mamá y suspira mientras deja la brocha en el tocador y me sonríe.
—Estás lista, sobrina—me dice tía Zaria.
Le sonrió levemente mientras que mi madre acomodaba mi cabello. Abren la puerta de mi habitación y Raven se asoma por el marco de la puerta.
—Papá dice que bajen luego—nos avisa
—Iremos en unos minutos cariño—responde mamá
Raven asiente y nos deja a solas nuevamente, tía Zaria y Alice salen de la habitación dejándome con mi madre a solas.
—¿Por qué estás así?—pregunto
—¿Así como?—inquiere
—Se te nota que no te gusta este compromiso—le digo
—Pues no me gusta, en general no me gusta los matrimonios sin amor y créeme que yo no quiero eso ni para ti ni para ningún de tus otros hermanos—explica mamá
—Mamá así es la Mafia—le hago entender—tu tambien te casaste con papá sin amor
Mamá me mira por unos segundos y suspira, hace una seña hacia la salida de la habitación.
—Vamos, tu padre odia esperar demasiado
Asiento mientras que la seguía, ambas bajamos al primer piso y salimos hacia el jardín donde se estaba realizando la fiesta de compromiso. Me acerco a papá que hablaba con el matrimonio Morgan. Mamá sonríe amablemente a la pareja mientras que se ubicaba aún lado de papá.
—Es bueno saber que mi hijo tendrá a una buena mujer a su lado—sonrie la señora Morgan en mi dirección—ya era hora que decidiera sentar cabeza.
—Era hora que se largara—susurra el padre de mi prometido
Muerdo mi labio para evitar soltar una risa y busco a Raven que hablaba con Alice y Adriana en una esquina. Bianca jugaba con Lia mientras que mi madre la vigilaba desde aquí.
—A todo esto, ¿Dónde está Jared?—inquiero
—Seguramente debe estar molestando a sus hermanas—responde la madre de Jared—o debe de andar por ahí correteando a Liam.
Asiento y le doy una mirada a papá, me alejo de ellos y me acerco a mi hermano y primas.
—Ya era hora que empezarás a largarte de mi mansión—dice Raven
—¿Disculpa?—me ofendo tomando una copa
—Estas disculpada hermana—sonríe de lado
—Seguramente Raven y los demás hombres nos echarán de la mansión—suspira Alice
—De eso no hay duda—apoya Adriana—no ven la hora de que nos casemos.
—Créanme que cuando se larguen seremos los hombres más felices—sonrie Raven
—Déjame decirte hermanito que todo esto es mio—me señalo
—Ya quisieras—bufa
—Recuerda que papá me dejara todo a mi—sonrio
—Si claro—se ríe
—Esta fiesta es aburrida—llega Matteo a nuestro lado. Su cabello rubio y ojos azules, alto y fuerte para solo tener dieciséis
—Acostúmbrate que habrán muchas—le sonríe Adriana
—Joder no—suspira
—No es tan mala—llega Dante, su cabello rubio y ojos grises, no es tan alto como su gemelo pero estaba casi a la misma altura—tu todo lo encuentras aburrido—se dirige a su gemelo.
—Es aburrida, todos hablan de negocios y si no hablan de la guerra con Rusia, ¿A qué carajos le importa lo que hagan los Rusos?
—Tenemos familia en Rusia—le recuerda Adriana
—Lo sé, pero me vale m****a oír lo que hacen los soldados Rusos—suspira molesto—¿Por qué no mejor me dicen si mi abuela está bien?
—La abuela debe estar bien—le doy una mirada
—Seguramente los tíos la tienen con cuidados al igual que nuestras tías y primas—dice Alice
—Mierda necesito que esto acabe ya—suplica Matteo
—¿Qué hablamos de las groserías?—llega mamá y mira seriamente a uno de los gemelos
—Vale—suspira
Mamá solo niega y vuelve a ir hacia papá. Miro a los gemelos que estaban rebuscando algo en la mesa. Ambos eran iguales pero a la vez tan diferentes.
Matteo era como papá, demasiado frustrado para tener dieciséis, muy frío en cierto casos, no le agrada mucho la idea de recibir afecto ni ofrecerlo, mientras que Dante era como mamá, muy agradable, poco frío, calculador, más tranquilo y menos frustrado, amaba dar afecto al igual que recibirlo, pero ambos compartían los mismos gustos como meterse en problemas y también acompañar a papá a veces a hacer unos trabajos.
Agarró una fresa y Raven me hace una mueca mientras que yo la comía gustosamente, el sabor dulce me hace sonreír.
—¿Como te puede gustar eso?—pregunta
—Son exquisitas—defiendo
—Aja si—bufa
—Papá te llama—me avisa Dante
Me vuelvo y papá me hace una seña para acercarme a él y mamá. Camino hacia ellos y mamá solo suspira mientras que Jared me daba una sonrisa ladeada.
—Jared—sonrio levemente
—Kira—asiente en mi dirección
—No fue mala idea—opina la Reina de la Mafia Negra—al fin dejaras de joder
Jared rueda sus ojos y nuestros padres asienten complacidos. Jared me entrega el anillo de compromiso oficializando nuestro futuro matrimonio.
••••••
Jasha Petrov
Unos días después
—La hija de Hades ha sido comprometida con el hijo de Mattheo Morgan—comunica un soldado—se casaran los primeros días de Agosto
—Debe estar buscando ayuda—murmuro mientras sonreía de lado de manera cínica
—Hades está quedando sin fuerzas—habla mi padre—busca aliados en Los Ángeles.
—Deberíamos hacer un ataque el día de su boda—propongo
—No sabemos donde se realizará—interviene Nikolay Petrov. Lo miro fríamente y el solo enarca una ceja.
—¿Qué más da eso?—pregunto—si no es Italia será en Los Angeles, ataquemos y matemos al jodido de Hades.
—¿Crees que eso sería adecuado?—inquiere uno de mis tíos—Jasha, deja de proponer ideas locas que nos ponen en riesgo a todos.
—No son ideas locas, me parece interesante lo que propone Jasha pero antes debemos de asegurarnos de todo—interviene mi padre
Miró con victoria a mi tío Mijaíl que solo suspira molesto, me recuesto en mi lugar y oigo lo que dicen cada uno.
Al acabar la reunión salimos del comedor y entro a la sala donde mi madre estaba con Larissa y Luisa.
—¿Tu padre?—pregunta mi madre
—Va a su despacho—respondo
Mi madre asiente y abandona la sala dejándome solo con mis hermanas. Larissa me mira fijamente tratando de analizarme de la misma manera que lo hacía nuestro padre. Le saco el dedo corazón y ella me devuelve la acción.
—¿Por qué son tan insoportables a veces?—pregunta Luisa
—¿Insoportables? Niña tienes quince recién—le recuerdo
—Pero soy más madura que ustedes dos—nos señala—siempre están peleando y eso que ya son mayores de veinte.
—Lu, tu sabes que nuestro hermanito es un insoportable—me saca en cara Larissa
—Y tu una pesada—le suelto
—Tu me amas hermano—me sonríe
—Ya—chasqueo mi lengua
—¿Es cierto lo que dicen?—inquiere
—¿Qué cosa?
—Kira Santoro contraerá matrimonio con Jared Morgan—habla Larissa
—Es cierto, será los primeros días de Agosto—respondo
Larissa asiente levemente mientras que jugaba con un mechón de su cabello.
Ambos teníamos una enemistad con los primeros dos hijos del matrimonio Santoro-Petrov. Raven y Kira Santoro eran unos putos presumidos, siempre lo fueron.
Nuestros padres fueron socios hace años atrás hasta hace un año atrás nada más, cada vez que ambos niños convivían conmigo y Larissa presumían sus cosas caras y eran demasiado egocéntricos, más aún Kira que tenía la misma actitud que su padre.
Raven fue algo que toleré porque a veces no siempre era insoportable pero su hermana sí que lo era. Tenía esa estúpida sonrisa en la cara con el cual consiguió todo lo que ella deseaba, con un solo puchero o carita de cachorro lograba que todos quedarán a sus pies.
Era una caprichosa e insoportable, siempre lo sería, pero me encargaría de quitarle esa sonrisa.
—¿Qué harás Jasha?—pregunta Larissa
—No se de que hablas—miento
—¿No sabes? Algo tramas
—Ya verás—me retiro de la sala







