PARTE III
Huellas en el pasillo
La distancia entre Weimar y Berlín es de 286 km exactos, según el mapa que saqué de la biblioteca improvisada del cuartel. Entonces, según mis cálculos, si tuviésemos un transporte, sea en carro o en moto, se tardaría dos horas con cuarenta y ocho minutos para tocar Berlín. No obstante, no tenemos ningún tipo de vehículo.
Si tardamos dos semanas en cruzar el bosque, entonces tardaríamos el triple para arribar al Palacio Real. Y no tengo la maldita resistencia para una caminata tan larga.
Frunzo los labios. Sería peligroso el ir hasta allá, pues sus centinelas tienen puestos de vigía a lo largo y ancho del país, más para llegar al punto de destino.
Me recuesto más en el sillón acolchado, al mismo tiempo que echo la cabeza para atrás,