Una tregua

-Ethan Scott -

Después de nuestro incidente en el gimnasio decidimos llegar a una tregua, la verdad es que como familia teníamos que ser un bloque común, nuestros padres están juntos y puede que sea loco, pero en definitiva terminaremos viviendo como una "familia" de alguna manera u otra en algún momento. si bien es cierto que con suerte nos decimos dos o tres frases al día algo es algo y espero que avancemos.

El viernes pasado pude agendar algunas operaciones pues el hospital no ha dado abasto con dos médicos fuera por algo que no es culpa de nosotros, así que me decidí y hablé con George, ya el encierro me tenía estresado y necesitaba salir de ese lugar o cometería un Valecidio...

Llego al hospital con Jex quien es ahora mi guardaespaldas personal, pues Jack está trabajando directamente con Blue y además se preocupa de la seguridad de los chicos.

- ¡Oh apareciste! -y esa es la loca de Daniela que se acerca a mí y me abraza como si nada hubiera pasado entre nosotros la última vez.

-Hola Collins -me suelto del abrazo como si fuera lepra y ella me mira mal.

-Te hemos extrañado por este lugar, ¿ya están mejor las cosas?

-Si, si claro, disculpa te dejo ya nos pondremos al tanto de los chismes del hospital -le digo para zafármela y salgo disparado de ahí, mientras Jex me sigue el paso aguantando la risa. -Ni se te ocurra decir nada.

-Ni pio señor...

Llego a la consulta de George y me reúno con él, revisamos algunos casos importantes y me comenta que tengo dos operaciones para el día de hoy, lo que me alegra el día, no crean que es por la adrenalina que me provoca operar, sino que la posibilidad de poder ayudar a alguien y darle unos añitos más de vida junto a los suyos. En los procedimientos me acompaña Bruno y agradezco que sea él y no Collins quien me acompañe pues no sería lo mismo.

Terminamos bastante bien ambas operaciones, Bruno va a informarle a las familias el estado de los pacientes y yo me dirijo a los vestidores, ha sido una jornada extenuante, pero satisfactoria y debo decir que me sentí completo dentro del quirófano, tomo mis cosas y me meto a la ducha para relajar mis huesos, estoy jabonando mi cuerpo cuando siento las manos de alguien abrazar mi cintura y empiezan a bajar hacia mi miembro...

-¿Qué m****a haces aquí Daniela? - como puedo me la quito de encima, la muy loca esta desnuda frente a mí queriendo tocar mi cuerpo y en estos momentos lo único que siento es ganas de mandarla a la china con boleto sólo de ida.

-Shuuu cariño quise venir a quitarte el estrés acumulado. -Intenta agarrarme el miembro el cual escondo entre mis manos pues creo que siento más vergüenza que deseo, de verdad que no sé en qué momento me fui a meter con esta loca, ahora lo único que quiero es que salga o salir disparado de aquí.

-¿Estás loca mujer? ¿Cómo se te ocurre venir a meterte a la ducha para pajearme? Basta, sal de aquí -Bramo furioso y ella me ve como una desquiciada. 

-Ethan cariño no te reprimas, yo sé que tú lo quieres. 

- ¡Basta Daniela!, pues si no te vas me iré yo-paso por su lado sin siquiera cerrar la llave de la ducha, creo que aún tengo jabón en los ojos, tomo mis cosas y me apresuro a vestir, estoy tan molesto con ella que no me cabe en la cabeza que esta mujer sea así, me sentí ultrajado por primera vez en la vida, es que dios no me cabe en la cabeza que esta mujer haya creído que me dejaría engatusar de nuevo por ella, creo que deberé hablar con George, de verdad que estoy preocupado por sus actitudes, no son normales.

-Ethan, lo siento cariño, pero te extraño me tienes sola desde que te fuiste a tus vacaciones y después que volviste solo te preocupas por la mustia esa de la doctora Soré.

-De verdad Dani que se zafó un tornillo, tú me conoces y aceptaste meterte conmigo, yo no vuelvo a probar el mismo platillo y contigo no voy a cambiar.

-¿Y con ella sí? -Brama furiosa mientras se acerca a golpearme.

- ¡Basta, es suficiente! por favor vístete y déjame en paz, esto ya es acoso y puedo denunciarte Dani, no me provoques.

-¿Y tú crees que alguien te va a creer? -me responde con suficiencia.

- ¡Daniela!

-Perdón, perdón cariño, prometo que no volverá a pasar, solo que te extrañé...

-Déjalo Daniela, no me hables, no me mires ni vuelvas a decirme absolutamente nada más por que de verdad ya me estás sacando de quicio. - Salgo de los vestidores y me reúno con Jex para volver al penthouse, por dios que ahora sí que extraño pasar con los chicos en casa...

Continue lendo este livro gratuitamente
Digitalize o código para baixar o App
capítulo anteriorpróximo capítulo
Explore e leia boas novelas gratuitamente
Acesso gratuito a um vasto número de boas novelas no aplicativo BueNovela. Baixe os livros que você gosta e leia em qualquer lugar e a qualquer hora.
Leia livros gratuitamente no aplicativo
Digitalize o código para ler no App