Y después de unos segundos Merida lo estaba besando también. Se estremeció en el momento en que Lee Joon deslizaba sus manos por la espalda pegándola más a él, Merida se vio asaltada por un anhelo que no se parecía en nada a cualquier otra sensación que hubiera experimentado antes. En ese momento lo estaba besando con abandono, no pensaba en nada, solo sentía, y en lo más profundo de su ser estaba segura de que lo que estaba sucediendo entre ellos era hermoso y necesario.
_ Deberíamos parar Merida_ dijo Lee Joon levantando la cabeza.
_ No!_ la palabra surgió violentamente de sus labios, sin pensar. Solamente sabía que necesitaba continuar hasta alcanzar lo que sólo él podía darle.
_ Merida_ mascullo Lee Joon antes de besarla de nuevo con pasión. De repente levantó la cabeza una vez más, y, en esa ocasión, sin consiguió apartarla con delicadeza, a pesar de que la joven se había aferrado a sus hombros_ Vamos a seguir con esto, pero no ahora_ le dijo con voz ronca.
_ ¿Por qué no?_ susurr